Plasdecor - perfiles de azulejo

Tendencias de interiorismo que marcarán 2026

23 diciembre 2025


En 2026, el interiorismo sigue alejándose del “decorar por decorar” y se acerca más a una idea que en contract y prescripción es clave: diseñar para usar. Espacios que se viven, se trabajan, se limpian y se mantienen. Con materiales que aguantan. Con decisiones que no dependen de una moda pasajera.

Para quienes trabajáis con cerámica, esto es una buena noticia. Porque la cerámica encaja muy bien en este nuevo marco: es resistente, versátil, higiénica y permite un nivel de acabado alto. Y, cuando el proyecto se vuelve más exigente, entran en juego esos elementos que a veces pasan desapercibidos, pero sostienen el conjunto: perfiles, remates, listelos y soluciones técnicas que hacen que el diseño funcione en obra.

A continuación, recopilamos las tendencias que se repiten en la conversación del sector y en análisis recientes de tendencias 2026, y las aterrizamos al día a día de proyectos reales.


Tendencia 1: Espacios híbridos y flexibles

La distribución rígida pierde fuerza. 
En vivienda, una misma zona puede ser comedor, oficina y lugar de reunión. 
En retail u hoteles, el espacio se adapta al flujo de usuarios y a eventos. Esta tendencia empuja a usar superficies duraderas, fáciles de mantener y con un diseño coherente.
Aquí la cerámica tiene terreno. Y también lo tienen los remates bien pensados: cambios de plano, encuentros limpios y transiciones bien resueltas para que el espacio “fluya” y no se rompa visualmente.


Tendencia 2: Paletas naturales y neutros cálidos

Los neutros siguen, pero cambian de temperatura. Menos gris frío, más beige, arena, greige, tierras suaves y verdes apagados. Se busca una base serena para que el proyecto aguante el paso del tiempo y no canse.
En cerámica, esto se traduce en:

  • piedras claras,
  • arcillas y calizas,
  • cementosos cálidos,
  • acabados mate muy suaves.

¿Y el detalle que remata? En esta estética, funcionan muy bien perfiles y listelos en tonos cálidos (latón, bronce, aceros mates o cepillados) usados como acento, sin convertirlos en “protagonistas a gritos”.

 

Tendencia 3: Más curvas y formas orgánicas

Los interiores se están volviendo más “amables” en su geometría. Curvas en mobiliario, arcos, nichos, soluciones de iluminación más continuas. No es solo estética: también cambia cómo se recorre el espacio.
Para cerámica, el reto es claro: el detalle constructivo sube de nivel. Cuanto más orgánico es el diseño, más importante es resolver cantos, remates y encuentros sin perder limpieza visual. En prescripción, esto se traduce en una pregunta constante: “¿Cómo lo vamos a rematar para que quede bien y dure?”

 

Tendencia 4: Textura y sensorialidad

En 2026 gana fuerza lo táctil: superficies con microtextura, relieves suaves, efectos “seda” o piedra marcada, y materiales que se sienten, no solo se ven.
En cerámica, esto abre dos vías muy claras:
 

  • Revestimientos con relieve controlado o 3D.
  • Acabados mate con profundidad, que disimulan mejor el uso diario que un brillo muy expuesto.

Y aquí aparece un punto técnico que en obra se nota: las texturas piden precisión. La junta se ve más. Los cambios de plano cantan más. Un perfil mal elegido rompe la continuidad en segundos. Uno bien elegido hace que el conjunto parezca “de catálogo”.


Tendencia 5: Artesanía contemporánea

No se trata de llenar el espacio de “ruido”. Se trata de introducir una capa artesanal: formatos pequeños, piezas especiales, mosaicos, cerámica con imperfección estética controlada.
Esta tendencia aparece en análisis de 2026 como parte del “lujo silencioso”: calidad, tacto, material real.
En proyectos contract, donde hay que equilibrar identidad y mantenimiento, el listelo decorativo es un recurso muy útil: aporta orden, separa zonas, define ritmos y ayuda a que una composición compleja se lea con claridad.
 

Tendencia 6: Contrastes medidos

Además del debate “color vs. neutros”, aparecen técnicas de pintura que vuelven a poner el foco en el techo y en la envolvente completa. Por ejemplo, el “color capping”, que trabaja con tonos de una misma familia para crear un efecto de gradiente en pared, molduras y techo.
Para el mundo cerámico, esto conecta con una idea: los interiores se diseñan por capas. Ya no vale con elegir un azulejo bonito. Hay que pensar cómo convive con iluminación, pintura, metal, carpintería y acabados.


Tendencia 7: Sostenibilidad práctica

La sostenibilidad en interiorismo 2026 se aterriza más: materiales que duran, que no se reemplazan cada pocos años y que requieren menos mantenimiento.
En cerámica esto es un argumento fuerte, sobre todo en contract. Y, para que ese argumento sea completo, hace falta coherencia en todo el sistema: remates resistentes, encuentros duraderos y soluciones pensadas para aguantar uso rea

 

Conclusión

Si tu trabajo está ligado a la cerámica, 2026 trae una oportunidad clara: el interiorismo pide superficies honestas, cálidas y táctiles. Pide coherencia. Y pide ejecución limpia.
En ese contexto, la cerámica suma. Y los detalles suman todavía más. Porque el proyecto no se entiende solo por lo que se ve en el render, sino por cómo se instala, cómo se remata y cómo envejece.